En el amor y la guerra todo se vale... ¿en el fútbol también?

Esto va a propósito de todas las polémicas suscitadas a partir de la última fecha que se jugó por el hexagonal.

Acusaciones varias como que la directiva de Barcelona está tentando a jugadores de Liga y Deportivo Quito (el precontrato de Giovanni Nazareno, la "calentada de oreja" a Damián Manso), el hecho que Martín Mandra haya señalado que el arbitraje de este país favorece a Barcelona y el caso del camerino visitante que debía usar Deportivo Quito se haya encontrado recién pintado, nos hace pensar: esta clase de tretas, ¿son propias de un fútbol "en vías de desarrollo" como el nuestro?. Esta misma semana se dio un caso en la liga italiana (corre vídeo!).



Para los que no saben italiano o no se hayan enterado de esta situación, uno de los jugadores que hacía la "contra-barrera" del cuadro del Catania (quienes convierten el tiro libre), se bajó los pantalones antes del cobro para distraer al arquero. Esta jugada ha generado mucha discución allá del otro lado del charco.

La interrogante final es la que sigue: ¿será por eso que el fútbol es tan bonito?, ¿porque es el deporte en el que se valen la mayor cantidad de cosas?, supongo es tal como la vida misma.