La octava fecha empezó en Azogues el pasado viernes; donde el equipo de dicha ciudad, que venía haciendo una buena campaña, no pudo con el Emelec; equipo que en cambio estaba muy mal, pero al parecer el triunfo frente a Nacional de Montevideo le pone de nuevo en carrera. Un fenómeno parecido tuvo Emelec el año pasado en el que arrancó mal y fíjense como acabó... absolutamente nada está perdido para la escuadra eléctrica. Mejor aún el resultado para los azules que remontaron y de visitante (con el agravante de la altura). Mientras que haya que ver hasta donde llega la regularidad de los guacamayos.
El día sábado, otro que viene recuperando (aunque solo en torneo local). El Nacional goleó 3-0 a Macará. Los de Ambato solo aguantaron el primer tiempo y para los criollos, la tranquilidad de que si les está rindiendo Kaviedes (primer gol fue de él). Aunque igual, el sabor amargo de la eliminación en Libertadores sigue. Para el Macará preocupación porque se viene desinflando y ya está último.
El domingo los dos últimos partidos (Liga difirió su partido con Olmedo pues sigue en el sur del continente para jugar su otro aprtido de copa). El Quito ganó a domicilio al Imbabura y confirma una buena campaña fruto de un interesante plantel conformado, mientras el Imbabura cada vez más hace ver que su limitación en presupuesto lo podría condenar. En la tarde el Cuenca arrancó un empate al Barcelona que hasta ahora no parece tener brújula, mientras que lso morlacos gozan de la buena conducción de Perrone
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